Chicas, el 2024 es nuestro año. No temas a librar de prestarle un poco más de atención al cuidado capilar. Y es que siempre nos proponemos el mismo propósito: tener una rutina facial perfecta y cuidar la piel al máximo. Pero, ¿y el pelo? Es una parte muy importante en nuestra apariencia, que nos hace vernos bien y sentirnos preciosas. Así que tiene todo el sentido de mundo: Si tu rutina facial es completa ¿por qué no evolucionas también tu rutina capilar? De eso trata esta tendencia que arrasa en 2024: “healthy hair”.
¿Qué es la tendencia de cuidado capilar “healthy hair”?
Prácticamente todas deseamos lo mismo: un cabello fuerte, saludable y brillante acompañado de un cuero cabelludo sano y sin problemas. Recuerda que el cuero cabelludo también es piel y debemos cuidarlo con la misma calidad de productos para evitar la caída u otros problemas como la dermatitis, sequedad, descamación, caspa, picazón, etc.
La tendencia “healthy hair” es de nuestras favoritas, porque predica la clave que necesitas si quieres recuperar tu pelazo. Realizar una buena rutina capilar sofisticada con varios pasos, pero no elegidos “al tun tun”, sino que incluya ingredientes poderosos, inteligentes y de calidad, esos que sabemos van a ser buenos para aportar vitaminas, nutrición y reparación al cabello.
Queremos tener un cuero cabelludo sano, sin acumulación ni bacterias, sin sensibilidad… y también un pelo mimado, sin roturas, fuerte, nutrido, con volumen y sin frizz. Sí, sobre el papel resulta idílico, pero esto no es tan fácil como nos gustaría en la práctica.
Factores que dañan el cabello
- El estrés.
- La polución.
- El sol.
- Las coloraciones.
- Las herramientas de secado o planchado.
- La edad.
- El agua de tu ciudad.
- Una dieta pobre en vitamina.
¡Todo influye en la salud capilar!
¿Qué consecuencias tiene para el cuero cabelludo?
Una de las consecuencias que pueden tener factores como los ambientales, el uso de determinados cosméticos, la acumulación de residuo o la genética es un cuero cabelludo sensible. Y es mucho más común de lo que crees.
Al igual que la piel puede ser sensible de forma habitual o en determinados momentos de nuestra vida, también ocurre con la sensibilidad del cuero cabelludo. A veces no nos damos cuenta porque no hay síntomas visibles pero otras sí, y es cuando vemos que hay descamación o rojeces que pueden estar acompañada de afecciones como eccema, psoriasis, dermatitis, alergias, pérdida del cabello…
Una mala salud del cuero cabelludo puede debilitar y dañar el folículo piloso. Así que, en caso de que tengas mucha sensibilidad, te recomendamos acudir a un dermatólogo. Pero si la sensibilidad es leve, se puede mejorar eligiendo una buena rutina capilar.
¿Quieres saber cómo solucionarlo? ¡Te lo contamos!
